Para definir esta muestra nos debemos remitir a un doble concepto que aparece, por un lado, la juventud de los creadores cobra mucha importancia, por las nuevas visiones que aportan al resultado final. Por otro, nos encontramos ante cuatro artistas que proyectan sobre la sala del Museo de la Universidad de Alicante conceptos, visiones, reflexiones y sensaciones que nos transportan en un espacio mucho más abierto; nuestra percepción de su creatividad.
El hecho de sentir cada obra nos acerca a todo el trabajo que han llevado a cabo; el tiempo, la deformidad, la reflexión de nuestro entorno y la introspección de la natura, son líneas de investigación que se nos ponen a nuestro alcance.
Neus Bou, Rubén Fresneda, Verònica Ortuño y Pau Sellés se nos presentan como nuevos retos conceptuales. Los cuatro son licenciados en Bellas Artes por la Universidad Politécnica de Valencia, y llevan a sus espaldas exposiciones colectivas e individuales que van formando, poco a poco, su personalidad artística.
Las miradas de los visitantes irán de una propuesta a otra, atrayéndose por los mensajes que, de una manera o de otra, enlazan con diferentes aspectos del ser humano y su entorno.
Neus Bou nos presenta su proyecto plástico, donde reivindica la identidad del ser humano como excepcionalidad traducido en la huella digital, el paso del tiempo reflejado sobre nuestros cuerpos y su trascendencia social y mediática. Su proyecto combina la fotografía, la performance o las esculturas, girando alrededor de estos mensajes.
Rubén Fresneda propone una línea plástica titulada «Alfanumérics», que se basa en el efecto administrativo sobre la sociedad. Desde que nacemos se nos asigna un número dentro del registro civil, un número para la Seguridad Social, un número identificativo nacional y así para cualquier trámite, hasta la muerte, somos números para todas las administraciones. Su obra se nos presenta como una repetición y una confusión de números i letras que tienen una finalidad aceptada dentro del devenir de nuestras vidas.
Verònica Ortuño ofrece un proyecto basado en la deformidad humana desde diferentes puntos de vista y técnicas. Muestra rostros y figuras humanas, que pierden su identidad al ser desfiguradas por gestos o acciones trabajados mediante la pintura y la estampación; usando la litografía, la serigrafía, el monotipo y la calcografía.
Pau Sellés nos traslada a su particular visión de los paisajes y entornos naturales. Refleja sobre los lienzos esta percepción única que tiene cada individuo, puesto que representa el sentimiento que le provoca la naturaleza transformándola una vez impregnado con todos sus sentidos. Y el resultado es este ambiente onírico que plasma sobre las telas, y que se traduce en una sensación sobre lienzo para el visitante.
Lucia Romero Segura
Historiadora y Crítica de Arte
Presidenta de Art Nostre